Hace dos meses Alberto Campo Baeza afirmaba en un artículo publicado por el diario económico español Expansión que el gimnasio del Colegio Maravillas, obra del fallecido arquitecto Alejandro de la Sota, era uno de los cinco edificios para los que había solicitado la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) a la Comunidad de Madrid.
Esta semana el periódico español El País dio a conocer que la Dirección General del Patrimonio ha decidido conceder este merecido y necesario reconocimiento a este sencillo y humilde gimnasio, ubicado en el corazón de Madrid y que está considerado como una de las obras más paradigmáticos e influyentes de la arquitectura española de segunda mitad del siglo XX.