El cortometraje dirigido por David Parker, nace con el fin de criticar la no-conciencia sobre los residuos de la energía. A través de la exploración de la arquitectura de la ciudad y abandonados paisajes, se presenta a la iluminación como un recurso útil más allá de un desperdicio: una razón en conservar la luz.
El significado metafórico alude al desperdicio de nuestros recursos naturales sin tener conocimiento del hecho.
