Ahora que los balcones han adquirido una gran relevancia en todo el mundo al oficiar como plataformas para la dispersión y la interacción social en aquellas regiones donde la cuarentena obligatoria –medida impuesta en un gran número de países para frenar los contagios de COVID19- no permite que los habitantes abandonen sus apartamentos, es un tiempo oportuno para pensar en las herramientas que tenemos para diseñar y acondicionar estos espacios.
Al desarrollar gran parte de nuestras actividades –y vidas- en interiores, los espacios que habitamos adquieren un papel muy relevante en lo que respecta a nuestra percepción, repercutiendo notablemente en nuestro comportamiento psicológico. La psicología ambiental o la psicología del espacio es, de hecho, resultado de la interacción entre las personas y los espacios que habitan. La iluminación, los colores, la configuración, la escala, las proporciones, la acústica y los materiales interactúan con el individuo a través de sus sentidos y generan en el mismo un variado espectro de sentimientos y experiencias.
Desde inducir sentimientos de calidez, seguridad y bienestar hasta crear ambientes de trabajo positivos y eficientes, el espacio puede tener un gran impacto en la forma en la que actuamos o sentimos; por lo tanto, el diseño puede ser un gran aliado siempre y cuando se consideren las necesidades sociales y psicológicas de los ocupantes.
Cuando hace tan solo dos meses la ciudad china de Wuhan anunciaba la construcción del Hospital Wuhan Huoshenshan para sumar 1.000 camas, 30 unidades de cuidados intensivos y nuevas salas de aislamiento a su oferta hospitalaria para el tratamiento de pacientes con coronavirus –proceso concluido en un período menor a 10 días por un equipo de 7.000 trabajadores-, muchos observamos esta experiencia como una situación lejana a la realidad de nuestros propios países. Sin embargo, hoy, con un saldo que supera las catorce mil muertes y más de trescientos mil afectados en todo el mundo, la insuficiencia de recursos médicos -y de espacio para la atención primaria e intensiva- en los centros de salud de las diversas ciudades ha comenzado a ser una amenaza real para la que muchos países ya han comenzado a prepararse.
El brote de COVID-19 ha causado que aproximadamente 900 millones de personas en todo el mundo permanezcan en sus hogares. Entre ellos se encuentran arquitectos y diseñadores a los que se les ha pedido que trabajen de forma remota para evitar que el virus se propague por el lugar de trabajo. Para muchos arquitectos, este es sin duda un nuevo territorio. Sin embargo, para ArchDaily, no lo es, y podemos asegurarles que es posible no solo trabajar desde casa, sino también utilizar este tiempo para mejorar tus habilidades, conocimientos y desarrollo profesional.
https://www.archdaily.co/co/936127/consejos-para-trabajar-en-arquitectura-desde-casa-durante-pandemia-de-covid-19Niall Patrick Walsh
A medida que China anuncia el cierre de hospitales temporales en Wuhan debido a la disminución de nuevos casos de COVID-19 y la estabilización de la pandemia, los países de Occidente están tomando posiciones cada vez más restrictivas para evitar la propagación de la epidemia. En vista de las políticas de cuarentena y aislamiento impuestas por las autoridades de todo el mundo, preguntamos a nuestros lectores cómo el coronavirus está afectando la vida cotidiana de los arquitectos. Las respuestas ayudan a componer una imagen general del clima creado por la pandemia, y la forma en que lo estamos tratando.
Introducida por Rudolf Steiner, la pedagogía Waldorf se alimenta de los principios de la filosofía antroposófica. Una de las principales características de su enfoque pedagógico es la suposición de que la formación de un ser humano debe ser holística: sus sentimientos, su imaginación, su espíritu y su intelecto serían una composición única, señalando que los pensamientos, sentimientos y acciones estarían siempre vinculados.
Entonces, el enfoque de la filosofía es desarrollar individuos capaces de relacionarse con ellos mismos y con la sociedad (inteligencia inter e intrapersonal); habilidades que son fundamentales para los desafíos del siglo XXI. Este aprendizaje se da con fuerza en las escuelas que siguen este método, introduciendo a las familias en el entorno escolar y transformándolas en una comunidad. Revisemos su funcionamiento y sus implicancias, a continuación.
El diseño de interiores dentro de la arquitectura se ha vuelto extremadamente relevante ya que los arquitectos y diseñadores se han hecho responsables de crear espacios agradables para las personas. ¿Te has preguntado alguna vez por qué hay espacios en los que podríamos quedarnos durante horas y otros que generan rechazo instantáneo? Estas sensaciones son una consecuencia de cómo manipulamos ciertos elementos y parámetros espaciales que inevitablemente afectan la forma en que nos relacionamos con el espacio.
La comodidad en el diseño de interiores, explicada de manera simple, puede ser entendida como espacios que nos producen bienestar. Esto, sin duda, puede ser un concepto algo subjetivo y personal para cada individuo, pero hay varios parámetros y regulaciones de construcción a seguir en los proyectos de diseño.
En 2018, la ONU publicó un artículo que afirmaba que el 55% de la población mundial ya vive en áreas urbanas, prediciendo que para 2050 este porcentaje alcanzaría el 68%. Esta tendencia hacia una mayor urbanización conlleva varias implicaciones con respecto a la degradación ambiental y la desigualdad social. Según National Geographic, el crecimiento urbano aumenta la contaminación del aire, pone en peligro las poblaciones de animales, promueve la pérdida de la cubierta arbórea urbana y aumenta la probabilidad de catástrofes ambientales, como las inundaciones repentinas. Es probable que los riesgos para la salud y los fenómenos catastróficos afecten en mayor medida a las poblaciones más pobres, ya que las ciudades más grandes tienden a presentar tasas más altas de desigualdad económica, y un crecimiento descontrolado tiende a producir distribuciones desiguales del espacio, los servicios y las oportunidades.
Para mitigar estos efectos negativos de la urbanización, los diseñadores y arquitectos están comenzando a priorizar cada vez más la sostenibilidad y la maximización del espacio disponible, permitiendo que más personas ocupen menos espacio con una huella más pequeña.
La pandemia del Coronavirus se ha tomado las noticias de los últimos meses y está imponiendo cambios hasta ahora inimaginables en la vida cotidiana de toda la población mundial. Aunque la situación es preocupante e incluso desesperada en algunos casos, conocer el comportamiento del virus y comprender las formas de evitarlo parece ser la mejor manera de enfrentarlo. COVID-19 es una enfermedad respiratoria y se propaga a través de gotitas en el aire. Lo que lo hace especialmente peligroso es su alta tasa de contagio; el virus puede sobrevivir fuera del cuerpo humano y moverse a través del aire, alojándose en superficies como el metal, el vidrio y los plásticos si no son desinfectadas adecuadamente. ¿Cómo se comporta el virus en cada uno de los materiales? [Última actualización: julio de 2020]
La resolución principal de la pandemia del coronavirus COVID-19 se convirtió para la mayoría de los países en la disposición de medidas de cuarentena: aislar estrictamente a personas de una enfermedad, durante un período de tiempo no especifico. El resultado, espacios públicos y privados cerrados que a la par de evitar nuevos contagios y lamentables muertes incrementaron la incertidumbre en la economía mundial bajo la pregunta ¿cómo vamos a trabajar? - traduciéndose para muchos en cómo vamos a comer.
Ahora que ralentizamos nuestras rutinas para reducir el impacto de la pandemia del COVID-19, queremos compartir con ustedes cómo hemos enfrentado esta situación como la empresa global que somos, y lo que estamos haciendo (junto a ustedes) para mantenernos a nosotros mismos —la comunidad arquitectónica—, informada y conectada. Es nuestra responsabilidad.
En los últimos tres meses, el coronavirus se ha extendido a más de 100 países y ha cobrado más de 3,800 vidas. También ha sumido a muchas industrias mundiales en una parálisis, desde vuelos cancelados y cuarentenas masivas hasta interrupciones en las cadenas de suministro y los mercados financieros.
Dejando a un lado las graves implicaciones para la salud, la epidemia de coronavirus ha ampliado, de manera poco ortodoxa, un debate sobre el futuro del trabajo. Con millones de personas en todo el mundo trabajando desde su hogar como resultado del brote, ya sea a través de la cuarentena o como medida de precaución de la empresa, se comienza a hacer la pregunta: ¿estamos viendo el principio del fin de la tipología tradicional de la oficina?
via Cities for Play. Designing Child Friendly High Density Neighbourhoods
'Cities for Play' es un proyecto cuyo objetivo principal es inspirar a arquitectos y urbanistas para crear ciudades estimulantes, respetuosas y accesibles para los niños y niñas.
Natalia Krysiak, su creadora, es una arquitecta y urbanista australiana que cree que las necesidades de los niños deben ubicarse en el centro del diseño urbano para garantizar la generación de comunidades resilientes y sostenibles. En 2017, produjo Cities for Play, estudiando ejemplos de ciudades que se preocupan por proporcionar entornos preparados para niños, capaces de promover su salud y su bienestar físico y emocional a través de un enfoque centrado en los juegos y la "movilidad activa" en los espacios públicos.
Aunque sabemos lo importante que es permitir la presencia de niños y niñas en espacios públicos y exteriores, es difícil negar que existen pocas ciudades preocupadas por ofrecer entornos preparados para la infancia; espacios seguros y dignos que les permitan experimentar lo urbano y así convertirse en ciudadanos conscientes de la vida en comunidad. Por este motivo, es comprensible también que, cada vez más, las familias generen momentos de ocio en espacios interiores, entregándoles a sus hijos la libertad y seguridad necesarias para aprender a moverse.
En este artículo, hemos seleccionado 11 increíbles ejemplos que demuestran cómo la arquitectura interior puede ayudar a crear espacios de juego para niños y niñas de todas las edades, ayudándoles a dar sus primeros pasos en este mundo con mayor autonomía y confianza.
A menudo reconocido como uno de los materiales de construcción más difundidos en todo el mundo, el ladrillo es indudablemente tan versátil como fácil de aplicar y de bajo costo. Al componer estructuras y cierres en los proyectos, es un material de fácil uso, poco mantenimiento y resistencia considerable, gracias a su forma de producción y disponibilidad de mano de obra en el mercado. Sin embargo, aunque en gran medida compone superficies verticales, también tiene excelentes propiedades cuando se aplica a superficies horizontales, como pisos.
Si bien la tecnología y la construcción han progresado rápidamente en los últimos años, permitiendo que las estructuras se construyan más altas y rápidas que nunca, las ruinas de los colosales edificios antiguos nos recuerdan que las técnicas de construcción de hace cientos de años también tuvieron grandes méritos. De hecho, muchas de las innovaciones de la antigüedad sirven como fundamentos para la construcción moderna, con el concreto romano como un ejemplo potente. Otras antiguas técnicas constructivas esenciales, como el arco y la cúpula, ahora se consideran ornamentos estilísticos, con diseños como el Met Opera House que reinterpreta las tipologías clásicas en un contexto moderno. Sin embargo, quizás las reinterpretaciones más relevantes de la construcción antigua en la actualidad son aquellas que lo hacen en búsqueda de la sostenibilidad, renunciando a los métodos de construcción modernos de alta energía en favor de técnicas más antiguas y más naturales.
https://www.archdaily.co/co/933035/el-futuro-de-lo-antiguo-como-se-estan-actualizando-las-tecnicas-constructivas-tradicionalesLilly Cao
Soy afortunado de haber visto numerosos edificios y espacios hermosos, así que cuando recientemente fui a Olot, cerca de Girona, España, para explorar las obras de los galardonados con el Premio Pritzker 2017, RCR Arquitectes, pensé que ya iba a estar completamente preparado. Pero aunque estaba familiarizado con sus trabajos a través de publicaciones, lo que encontré de primera mano me conmovió de las maneras más sorprendentes y encantadoras. El puro ingenio y la brillantez de estas estructuras, tan integrales a sus lugares y consecuentes de sus programas dados, potencian la arquitectura y producen sensaciones que son realmente especiales e inolvidables.
La construcción con madera se remonta al período del Neolítico, o incluso antes, momento en que el ser humano comenzó a utilizar troncos para construir refugios y pequeñas chozas. El surgimiento de los primeras herramientas de piedra pulimentada (frotadas unas contra otras), como cuchillos y hachas, hicieron que su manejo fuese más eficiente y preciso, aumentando el grosor de sus secciones y su resistencia. Con el pasar de las décadas, la apariencia rústica de las primeras construcciones fue haciéndose cada vez más ortogonal y limpia, en respuesta a la estandarización, la producción en masa y el surgimiento de nuevos estilos y estéticas.
Hoy nos encontramos en un emocionante momento de florecimiento y evolución de la madera. Nutrida y fortalecida por avances tecnológicos, nuevos sistemas de prefabricación, y una serie de procesos que aumentan su sostenibilidad, seguridad y eficiencia, la madera está comenzando a colonizar los skylines de las ciudades y a su vez, está reconectando nuestros espacios interiores con lo natural a través de su calidez, textura y belleza. ¿Por donde nos llevará este camino? Revisemos 7 tendencias que sugieren una dirección.