En el decimotercer arrondissement de París, la oficina de arquitectura Moreau Kusunoki ha completado Le Berlier, una torre de madera de 50 metros de altura, la cual alberga unidades residenciales junto con varias comodidades adicionales. Situado en la intersección de múltiples flujos urbanos, redes y escalas, el proyecto tiene como objetivo encontrar el punto intermedio entre la innovación, la monumentalidad y la domesticidad. El nuevo centro residencial expresa su sistema estructural a través de la rejilla de la fachada, realizada en madera carbonizada y pre-envejecida.
La madera, uno de los materiales de construcción más antiguos, ha sido continuamente reinventada a lo largo de la historia. A medida que la arquitectura contemporánea se preocupa cada vez más por la sostenibilidad y la responsabilidad ambiental, la popularidad del material también ha aumentado. A medida que los árboles absorben dióxido de carbono durante su crecimiento, su madera almacena ese carbono, manteniéndolo fuera de la atmósfera. Los materiales derivados de la madera están asociados así con menores emisiones de gases de efecto invernadero bajo la condición de que los árboles sean extraídos de bosques gestionados de manera sostenible. Pero para aprovechar al máximo este material, una gran cantidad de técnicas y modificaciones han evolucionado con el propósito de adaptar y personalizar las características de la madera a las demandas del diseño y la construcción moderna. Desde la modificación térmica hasta la madera laminada o los versátiles tableros de partículas, estos métodos no solo mejoran la idoneidad de la madera para los rigores de la arquitectura contemporánea, sino que también expanden la utilidad de este material sostenible a una escala sin precedentes.
La Casa de Campo / Studio Precht. Imagen cortesía de Precht
La madera, un material de construcción ancestral, ha dejado su huella en la historia de la arquitectura. Estructuras como casas adosadas y antiguas catedrales han visto el uso e innovación de la madera como material principal. A medida que la tecnología evoluciona y los paisajes urbanos crecen hacia el cielo, la madera ha surgido como un fuerte competidor del acero y el concreto en el diseño de rascacielos. Los avances recientes en ingeniería, ciencia de materiales y técnicas de construcción han dado la bienvenida a una nueva era de experimentación, permitiendo la construcción de rascacielos de madera en todo el mundo. Los rascacielos de madera representan una ruptura con los métodos de construcción tradicionales, fusionando perfectamente la estética, la funcionalidad y la conciencia ecológica. La madera como material, con su resistencia inherente y su impresionante resistencia al fuego, ofrece esperanza a una industria en busca de un futuro más sostenible.
La madera ha sido una fuente popular de material de construcción durante miles de años. A través de procesos de aserrado, fresado y otros procesos de conversión de madera, se han creado y aplicado diversas formas de madera en productos, muebles y arquitectura. Sin embargo, estos procesos a veces pueden alterar las líneas básicas de la estructura de la madera. Los tallos pueden dividirse, los patrones de grano pueden cambiar y algunas maderas, como el roble y la secoya, se reducen fácilmente mientras que otras pueden volverse intratables. Esto llevó a la exploración de formas de madera entera en estructuras antiguas, como las cabañas de troncos, que superponían madera en diferentes secciones transversales para formar perfiles de vivienda. A través del diseño, el uso de troncos o ramas de árboles en su totalidad puede acentuar sus propiedades mecánicas innatas para la sostenibilidad estructural. Aunque estas prácticas están bastante ausentes en las técnicas de construcción contemporáneas, las nuevas innovaciones tecnológicas expanden las perspectivas de la construcción con madera en la arquitectura.
Cuando se trata de resistencia sísmica, existen una serie de mitos que cuestionan la capacidad de la madera para cumplir un papel efectivo en caso de un terremoto. Sin embargo, su ductilidad le permite deformarse plásticamente sin romperse, absorbiendo y disipando la energía generada por el movimiento y la vibración. Además, a diferencia del acero o el hormigón, la madera es un material ligero con una buena relación resistencia-peso, lo que le permite soportar fuerzas sísmicas sin sumar una carga excesiva a la construcción. Esto ha sido ampliamente verificado en viviendas de todo el mundo. Pero, ¿cómo se comporta un edificio de madera de gran altura frente a un terremoto?
Para disipar dudas, el Proyecto Tallwood levantó recientemente un edificio de 10 pisos de madera contralaminada (CLT) en la Universidad de California, San Diego (UCSD). La estructura fue evaluada en una mesa vibratoria que simuló el terremoto Northridge de 1994 en Los Angeles, de magnitud 6.7, y el terremoto Chi-Chi de 1999 en Taiwán, de magnitud 7.7.
Mass timber components for this project were prefabricated offsite which not only aids in the ability for on-site assembly but also aids in the disassembly of projects in the future if needed. Timber's versatility allows it to be disassembled and then reassembled into other buildings and furnishings, sequestering carbon for longer so long as it stays out of the landfill. Photo: PH1 construction by Naikoon Contracting, KK Law. Image Cortesia de naturallywood.com
El primer Shikinen Sengu se realizó en el año 690, en la ciudad de Ise, Provincia de Mie, Japón. Consiste en un conjunto de ceremonias que duran hasta 8 años, comenzando con el ritual de la tala de árboles para la construcción del nuevo Santuario de Ise y concluyendo con el traslado del espejo sagrado –símbolo de Amaterasu-Omikami– al nuevo santuario por sacerdotes Jingu. Cada 20 años, se construye un nuevo palacio con exactamente las mismas dimensiones que el original, en un terreno adyacente al santuario principal. Shikinen Sengu está vinculado a la creencia sintoísta de la muerte periódica y la renovación del universo, transmitiendo además las antiguas técnicas constructivas en madera de generación en generación.
La idea de levantar un edificio con fecha de caducidad no es tan común. De hecho, se aborda muy poco el tema de la vida útil de los edificios. Una vez demolido, ¿a dónde van los materiales? ¿se eliminarán en vertederos o se podrán reutilizar en nuevos proyectos? Existen construcciones, métodos de construcción y materiales que facilitan este proceso. Otros hacen inviable la reutilización, debido a una serie de factores.
El hormigón, material de construcción por excelencia, nos ha ofrecido por décadas la posibilidad de dar forma a nuestras ciudades de forma rápida y efectiva, extendiéndose rápidamente hacia las periferias urbanas o alcanzando alturas antes impensadas por la humanidad. En la actualidad, las nuevas tecnologías en madera están comenzando a entregar oportunidades similares –e incluso superiores– a las proporcionadas por el concreto, entre ellas, la madera laminada cruzada (también llamada madera contralaminada o CLT).
Con el objetivo de profundizar en sus propiedades y beneficios, conversamos con Jorge Calderón, Diseñador Industrial de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y Gerente de CRULAMM, quién nos revela algunas de las prometedoras oportunidades que podría entregar el CLT a la arquitectura en el futuro.