

Descripción enviada por el equipo del proyecto. El Impluvium fue creado como parte de una convocatoria de proyectos por el parque agrícola y cultural, liderado por la Ferme de Vernand y la Asociación de Polyculture. Este parque tiene como objetivo reimaginar la transformación de la granja en un lugar que sea nutritivo, ecológico y compartido, aportando nuevas imágenes, representaciones y prácticas a los espacios rurales, agrícolas y de vida.



Busca fortalecer las prácticas agroecológicas ya existentes (agroforestería, máxima diversificación de producciones, autonomía alimentaria, pastoreo rotacional, etc.). Al mismo tiempo, busca abrir aún más el sitio y ofrecer oportunidades para interpretar los paisajes y entornos agrícolas que abarca.



El proyecto se ubica en la orilla de un estanque, una característica hecha por el hombre cuyo propósito original no se conoce con precisión. Sin embargo, independientemente de su función inicial, su valor hoy va más allá de eso y radica en varios aspectos. Es un ambiente que alberga una biodiversidad significativa y específica, contribuyendo a la riqueza y complejidad del parque agrícola y cultural en el que se encuentra. Sirve como reserva de agua, que puede ser utilizada para el riego cuando sea necesario. Finalmente, se ha convertido en un lugar agradable para los residentes locales. La instalación toma la forma de una micro-arquitectura que crea una relación con el estanque de varias maneras, invitando a la reflexión sobre nuestra relación con el agua dulce como un recurso raro y cada vez más frágil, y como un elemento fundamental de los ecosistemas a los que pertenecemos.



Al hacer referencia al antiguo arquetipo de un techo que lleva el agua de lluvia a un estanque en su centro, la instalación resalta la recolección y almacenamiento del agua. Esta antigua práctica sirve para diversos propósitos y sigue siendo central hoy en día, particularmente en áreas rurales y agrícolas. A través del almacenamiento temporal de agua, el ciclo se ralentiza, con un paso adicional insertado en el proceso que lo vincula al estanque, donde el agua eventualmente será liberada. El proyecto así muestra el ritmo y volumen de las precipitaciones, su abundancia o escasez, con variaciones que afectan la cantidad de agua recolectada y almacenada temporalmente. Como un lugar de pausa, este pabellón ofrece refugio para contemplar el lago y el paisaje circundante, invitando a los visitantes a considerar cómo usamos el agua —para utilidad, recreación o nutrición— y a reflexionar sobre el papel del agua dulce en un ciclo global.
