Abre más puertas es una sección de ArchDaily y MINI Clubman que te lleva detrás de la escena de las oficinas más innovadoras del mundo, a través de emocionantes entrevistas en video y una galería de fotos exclusiva con sus espacios de trabajo.
Para esta entrevista, hablamos con Jianxiang He y Ying Jiang de O-Office, donde discutieron su enfoque poco convencional de la arquitectura y la vida en el estudio. Su oficina, una gran fábrica de cerveza reutilizada cerca del centro de Guangzhou, refleja el interés de la empresa en la historia y la tradición y su desprecio por la densidad y el rápido desarrollo que consideran caracterizan al resto de la ciudad.
O-Office fue fundada entre 2006 y 2007 como la primera oficina de arquitectura independiente en Guangzhou. Jiang y He, quienes estudiaron en Europa y luego regresaron a China para trabajar para grandes empresas, finalmente decidieron comenzar su propia práctica para escapar de la preocupación de la industria por el rápido desarrollo inmobiliario y la estandarización sin alma. Como la primera empresa de su tipo, eligieron llamarse "O-Office" - "O" con la intención de significar "cero", lo que simboliza que estaban comenzando desde cero.
Desde el principio, O-Office se resistió al "motor del desarrollo" de Guangzhou, una competitividad económica que desalienta la creatividad o la innovación. Tratando de agregar un valor extra a la arquitectura y, por lo tanto, a la vida, trataron de conciliar la rápida modernización de la ciudad con sus 2000 años de tradición, gran parte de la cual se había ocultado debajo de la urbanización indiscriminada de Guangzhou. Este objetivo despertó su interés en la renovación, lo que les permitió retener las capas históricas de la ciudad mientras les permitía ser reutilizados y mejorar su habitabilidad.
El propio espacio de oficina de O-Office tipifica sus proyectos de renovación no convencionales, promoviendo su objetivo de transformar incluso reliquias a corto plazo para que las personas sean conscientes de las tradiciones y la historia más antiguas. Para una práctica preocupada por encontrar conexiones ocultas con el pasado, la tradición y la geografía, su ubicación junto al centro histórico de Guangzhou. Y finalmente, su determinación de luchar contra las demandas disciplinarias claustrofóbicas de los clientes y de la industria se refleja en la relajación de su espacio de oficina abierto: con una cocina, baños, dormitorios y bar, la oficina se siente tanto como un espacio de estar como un lugar de trabajar. Su balcón, una parte integral del espacio, proporciona no solo aire fresco y un espacio para relajarse, sino que también tiene varias plantas frutales y un jardín para cuando cocinan. Jiang y He describen su oficina como un aumento del sentido de familia, sintiéndose más como un taller que como un entorno profesional rígido.