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Arquitectos: Romera y Ruiz Arquitectos
- Área: 498 m²
- Año: 2010
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Fotografías:Simón García
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El proyecto de arquitectura negocia siempre con el territorio, aunque a veces esta negociación nos venga dada. En el centro comunitario El Lasso, la calle de tráfico rodado y la topografía definen una forma y un lugar, el proyecto se limita a limitar, a construir el encuentro entre un jardín y un mirador hacia el mar.
Muchas veces la arquitectura construyó estas fronteras permisivas, como los muros construidos en los barrancos que evitan la erosión de los mismos. El deseo de crear un lugar siempre es anterior a la realización arquitectónica.
El jardín interior inventa un dominio colectivo formado por un vacío arbolado protegido del exterior, por un muro perimetral curvo existente, convirtiéndose así en el escenario de una representación adecuada a los usos comunitarios del barrio.
La Edificación mira al Océano Atlántico, entre las vistas al mar y el jardín interior, a través de una terraza longitudinal, como filtro entre el exterior e interior, consiguiendo estratos espaciales atravesados por grandes huecos luminosos y condiciones óptimas de sostenibilidad y confort.
El color vivo y las sombras llenan de movimiento el plano de la fachada hacia el mar, que queda así convertido en un paisaje de luz polarizada, no como elemento pasivo que se muestra y exhibe, sino más bien como actor del edificio. La planta se convierte en un grueso muro sobre el que se tallan y orientan los distintos espacios, que como cámaras fotográficas captan instantáneas del entorno.
Nada que da por añadir sobre esta arquitectura que con la naturalidad de la labranza se hace contenido del territorio y encarnación del paisaje canario, pleno de color, tapias secas, rodrigones, torrentes y acequias.