-
Arquitectos: EVA architecten
- Área: 1400 m²
- Año: 2023
-
Fotografías:Sebastian van Damme
-
Proveedores: Aesy Liften, Centor Doors, Ecophon, Gyproc Rigitone, Velux flat roof
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La escuela primaria De Boemerang está situada en Ondiep, Utrecht. Ondiep es un barrio obrero en gran parte pavimentado y poco verde. Por eso, al integrarnos en el barrio, quisimos añadir vegetación, conservar los dos árboles monumentales de la plaza trasera y hacer más habitable una plaza que, de otro modo, estaría totalmente pavimentada.
El distrito tiene una distribución ortogonal con principalmente edificios residenciales. La ubicación de la escuela es el final de una cuadra residencial y su fachada principal se integra con el lenguaje de diseño ortogonal y la arquitectura de ladrillo del vecindario. Al alejar el edificio de la acera frontal, se crea espacio para un patio delantero verde. Las grandes ventanas con huecos profundos también crean espacio en la fachada para la vegetación, que se puede contemplar desde el interior.
En la parte trasera, lejos de la calle, se encuentra la plaza. Queríamos conservar los dos grandes árboles que proporcionaban sombra escasa en el vecindario y eran la única cualidad verde en la situación anterior. La parte trasera de la escuela ha sido diseñada alrededor de los árboles: el edificio comienza ondiep (palabra neerlandesa para poco profundo, valga el juego de palabras) donde se encuentran los árboles y se ensancha hacia afuera.
Para la fachada, en contraste con el frente urbano, optamos por un lenguaje de diseño suave con formas fluidas y un cálido revestimiento de fachada en madera. Así se crea una plaza acogedora con una escala humana en la que la fachada serpenteante crea automáticamente lugares diferentes en las clases inferiores y superiores. La propia plaza también ha sido ajardinada y diseñada por Buro Beuk.
El corazón de la escuela está formado por el café Boemerang. Es el lugar de entrada, donde se organizan actividades generales para la escuela y el vecindario, y donde todos se encuentran. La sala de juegos está contigua al café Boemerang y al plegar una gran pared de vidrio, estos espacios se pueden unir para actividades más grandes. Desde el café Boemerang, se accede a todos lo sectores. Un gran vacío facilita la orientación desde todas las áreas y por los pasillos llenos de luz natural llegamos a cada zona. Ampliar los pasillos crea lugares de trabajo concentrados fuera de las aulas. Hemos mantenido el interior modesto con madera y una suave paleta de colores.