1. Casa de Estudios para Artistas / Antonio Bonet. 2. Terrace Palace / Antonio Bonet, Roberto Luna, Raúl Fernández y Alejandro Zamudio. 3. La Obra Urbana de Togo Díaz / José Ignacio Díaz. 4. Colegio Manuel Belgrano / Bidinost+Chute+Gasó+Lapacó+Meyer. 5. Biblioteca Nacional Mariano Moreno / Testa, Bullrich y Cazzaniga. 6. Facultad de Arquitectura de Mendoza / Enrico Tedeschi. Image
Dentro del territorio sudamericano, se han establecido diferentes fechas para homenajear y honrar la trayectoria, vida y obra de los profesionales de la arquitectura. Mientras en Uruguay se celebra cada 27 de noviembre en relación a la creación de la primera Facultad de Arquitectura, en Brasil cada 15 de diciembre en homenaje al nacimiento de Oscar Niemeyer o en Chile cada 4 de agosto por la fundación del Colegio de Arquitectos, la Federación Argentina de Entidades de Arquitectos (FADEA) mantuvo el 1° de julio para conmemorar el Día del Arquitecto/a Argentino/a respetando la instauración del Día Internacional de la Arquitectura, constituido por la Unión Internacional de Arquitectos (UIA) en 1985.
Martha Levisman en su estudio, 1990. Image vía Un Día | Una Arquitecta
Arquitecta y archivista. Fue autora de los tres edificios de la Fundación Antorcha en Buenos Aires. Realizó el diagnóstico, propuesta de refuncionalización, presupuesto y estudio de equipamiento de la Biblioteca Nacional en Buenos Aires para su terminación y puesta en marcha. Fue Directora del Centro ARCA (Asociación Civil para el Archivo de Arquitectura Contemporánea Argentina) entre 1998 y 2002.
Lograr el mayor aprovechamiento de los espacios, reducir la pisada de las edificaciones que se construyen y diseñar una distribución óptima que pueda suplir las necesidades de sus habitantes resultan ser de los requerimientos y desafíos que afrontan, día tras día, arquitectos y arquitectas alrededor del mundo. A través de la implementación de determinados materiales, la definición de la morfología o mismo las condiciones geográficas y naturales del terreno es posible llevar a cabo diversas estrategias que permitan proyectar viviendas con el confort que sus usuarios necesitan y en la menor cantidad de metros cuadrados posible.
Hacia fines de la década de 1970, la oficina de arquitectura de Flora Manteola, Javier Sánchez Gómez, Josefina Santos, Justo Solsona y Rafael Viñoly (MSGSSV) junto a Carlos Sallaberry comenzó a idear el proyecto para el Edificio Prourban, que se convertiría en uno de los más emblemáticos de la ciudad de Buenos Aires y sería apodado popularmente como “El Rulero”.
El ingreso de luz natural, la mejora de las condiciones de ventilación y la posibilidad de potenciar la conexión con la naturaleza sin que esto implique una pérdida de la privacidad, han generado que los patios internos se transformen en elementos adoptados e incorporados con frecuencia en muchos planteos arquitectónicos.
Los patios interiores se caracterizan por ser zonas descubiertas o semicubiertas, localizadas en el interior de los edificios y con sus perímetros delimitados por paredes, galerías u otros elementos. Estos espacios, exteriores pero contenidos, cumplen en muchos casos un rol crucial en la configuración y organización de la planta de los proyectos y, en algunos casos, representan el único punto de conexión de los usuarios con el exterior.
Independientemente del diseño que se adopte para los espacios de las cocinas, desde hace ya algunos años y cada vez con mayor frecuencia son muchos los arquitectos y arquitectas que deciden proyectarlas integrándolas a otros ambientes del hogar. Libres de muros o carpinterías divisorias, las cocinas integradas se implementan con el objetivo de dejar a la vista de todos las actividades que allí se llevan a cabo fomentando la interacción y la comunicación entre los habitantes.
Durante los últimos años, las terrazas han cobrado un gran protagonismo en la vida urbana actuando como refugio, espacio de disfrute y reunión, de contemplación o bien como espacio de trabajo al aire libre. Producto de los períodos de confinamiento dados hacia el inicio de la pandemia de Covid-19, estos espacios exteriores donde poder hacer ejercicio físico, conectar con la naturaleza, estudiar o trabajar se volvieron aclamados en especial por quienes viven en las grandes urbes.
Cortesía de Museo Cooperativo de la ciudad de Eldorado
El contexto global de crisis energética y ecológica ha hecho que, desde hace varios años, estos temas se empiecen a hacer eco en varias disciplinas. La arquitectura no ha quedado al margen de ello. Es entonces cuando aparece el interrogante acerca de qué aportan nuestros edificios para contribuir en la mitigación de estos problemas. En este contexto, invadieron la escena global de producción arquitectónica edificios que atienden al problema con una alta dependencia tecnológica. Con el objetivo de atender los problemas del ambiente hay quienes olvidaron que la arquitectura puede asumirlos en una respuesta sintética, a través del entendimiento del lugar y la manipulación de la forma, la materia y la energía.
Fue diseñada y construida entre 1943 y 1946 por Amancio Williams y Delfina Galvez Bunge sobre el Arroyo Las Chacras en la ciudad de Mar del Plata. Se convirtió con el tiempo en “La casa sobre el arroyo” o “La casa del puente”. Pero dejo de tener arroyo y de ser puente en 1957 cuando el curso de agua sobre el que se posaba fue interrumpido por cuestiones de saneamiento. Hizo de radio entre 1970 y 1977. Pero la última dictadura militar vivida en Argentina la terminó clausurando. Permaneció cerrada, mantenida por su propietario hasta su muerte en 1991. Estudiada por todos, pero cuidada por ninguno. Sufrió dos grandes incendios, en 2004 y 2008. Abandonada durante todo el proceso de sucesión, fue recuperada por el Municipio de General Pueyrredón en 2012.
La madera como recurso constructivo es una cuestión milenaria, tuvo su origen incluso antes de que se desarrollaran las herramientas necesarias para trabajarla y explotar su potencial. Este material se caracteriza principalmente por su gran versatilidad, donde sus ilimitadas formas de uso y su gran capacidad para dotar a los espacios de atmósferas acogedoras, lo convierten en una materia prima frecuentemente elegida en la arquitectura.
Ya sea como cerramiento de un sistema constructivo en seco –como Steel frame o Wood frame, montándose sobre armazones constituidos por perfiles de acero o madera-, o como revestimiento exterior en obras construidas con sistemas tradicionales, la chapa acanalada se presenta como una opción ventajosa a la hora de materializar las terminaciones exteriores de un proyecto arquitectónico debido a su economía, su mínimo mantenimiento y su versatilidad, permitiendo materializar tanto cerramientos verticales como cubiertas.
Como menciona Francis D. K. Ching en su Manual de dibujo arquitectónico, a comparación de los dibujos ortogonales convencionales -las plantas, los cortes y las vistas-, que permiten representar los proyectos arquitectónicos de manera bidimensional y solo “a través de una serie fragmentada de vistas relacionadas”, los dibujos de vista única, dentro de los cuales se encuentran las axonometrías -también conocidas como perspectivas o proyecciones axonométricas-, permiten ilustrar las tres dimensiones de forma simultánea, incorporando nociones de profundidad y espacialidad en los dibujos técnicos.
Oficios Asociados es un emprendimiento argentino dedicado al diseño y producción de mobiliario y arquitectura. Absorbiendo encargos muy disímiles que van desde el desarrollo de piezas artísticas hasta el diseño de sistemas industrializados de vivienda, cruzan constantemente los límites de la arquitectura para nutrirse de los saberes de otras disciplinas y oficios como la herrería, la carpintería y el diseño industrial. Teniendo a la técnica y a la materialidad como estandartes, realizan tanto proyectos propios como trabajos para terceros, colaborando en el desarrollo de estructuras o elementos particulares para obras como, por ejemplo, la Casa Scout de BAAG (donde oficiaron de constructores de la malla metálica que cubre la fachada).
Muchos arquitectos y arquitectas han sabido difuminar los bordes de la disciplina y trasladar sus conocimientos en materia de diseño y proyecto a otros campos tangenciales a la arquitectura. Con la tecnificación, el desarrollo material y la posibilidad de producir objetos y muebles utilitarios de manera industrial, muchos profesionales, paralelamente al ejercicio de su arquitectura, decidieron volcarse a explorar el campo del diseño de mobiliario, objetos y productos varios que, siguiendo el espíritu de la época, pudiesen colaborar a mejorar la vida cotidiana de las personas y dar respuesta a los nuevos cánones estéticos y los nuevos modos de habitar.
Los patios interiores se caracterizan por ser zonas descubiertas, localizadas en el interior de los edificios y con sus perímetros delimitados por paredes o galerías. Estos espacios exteriores pero contenidos, cumplen en muchos casos un rol crucial en la configuración y organización de la planta de los proyectos. En ciertos casos pueden funcionar a modo de pulmón central, aglutinando los espacios en su perímetro. También pueden concebirse como elementos organizadores de los recorridos o como espacios articuladores, conectando y a la vez dividiendo los distintos sectores del proyecto.
Numerosas ventajas, tales como el ingreso de luz natural, la mejora de las condiciones de ventilación y la posibilidad de potenciar la conexión con la naturaleza sin que esto implique una pérdida de la privacidad, han generado que este recurso se transforme en una solución efectiva para muchos planteos arquitectónicos. Por este motivo, ofrecemos a continuación una selección de 15 proyectos en Argentina donde los patios interiores adquieren un gran protagonismo.
“Sin correr tras el hallazgo de formas forzosamente originales, sin búsqueda de efectos estéticos, novedosos, la adaptación estricta y consecuente de la vivienda al clima ha conducido progresivamente, a una nueva arquitectura, autóctona y auténtica.” (1)
Wladimiro Acosta nace en Odessa el 23 de junio de 1900. Allí se egresa de la escuela de Bellas Artes con el título de Bachiller y Técnico en Construcción en el año 1917. Posteriormente, en 1919, se traslada a Italia con el objeto de continuar sus estudios de arquitectura, ingresando en la Escuela Superior del Instituto de Bellas Artes de Roma, recibiéndose de Licenciado en Arquitectura y ejerciendo como profesor de Diseño Arquitectónico entre los años 1920 y 1921. En 1922 se traslada a Alemania, país donde vive hasta 1928, año en el que abandona Europa para viajar a Buenos Aires.
Se dieron a conocer los ganadores del Concurso Nacional de ideas “Hábitats Emergentes” en Argentina, una convocatoria realizada por el Estado Nacional a través del Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible que invitaba a los estudiantes universitarios, docentes e investigadores del país a presentar propuestas de diseño para la construcción de viviendas con eficiencia ambiental que puedan ser construidas en situaciones de emergencia.