
-
Arquitectos: Architectural Bureau G.Natkevicius & Partners
- Área: 3009 m²
- Año: 2023
-
Fotografías:Lukas Mykolaitis

Descripción enviada por el equipo del proyecto. El edificio, situado en la pintoresca zona central de Kaunas, es un importante emplazamiento industrial: albergó una de las imprentas más grandes y significativas de Lituania, «Spindulys», que funcionó de 1928 a 2009. Aunque la imprenta, construida según un diseño típico de edificio industrial de entreguerras, no se consideraba una estructura arquitectónicamente valiosa, era mucho más que un simple objeto industrial. Es una parte cultural, económica e históricamente significativa de la ciudad de Kaunas: aquí se imprimían publicaciones particularmente importantes de la época, e incluso se acuñaban las monedas de la República Lituana (incluidas las series de 1925, 1936 y 1938).



Igualmente importante es el hecho de que Kaunas, como antigua ciudad industrial, tiene su carácter único, y los edificios conservados o sus fragmentos contribuyen a preservar esa identidad. Por ello, teniendo en cuenta el contexto histórico y el potencial del edificio, se decidió no demolerlo, sino revitalizarlo actualizando el exterior y adaptando la distribución interior a nuevos fines, conservando al mismo tiempo el volumen del edificio y su característica estructura industrial.

El objetivo de la revitalización del edificio era adaptarlo a las necesidades de una escuela moderna y poco convencional sin perder el carácter del edificio: crear espacios funcionales y eficaces para distintas actividades, fácilmente modificables, y crear un ambiente dinámico, democrático y libre dentro de la escuela. Se trata de un espacio en el que los hijos de los directores les llaman por su nombre y en la que no hay despacho del director ni timbre que llame a las clases. Es una estructura espacial clara, donde hay salas tranquilas y orientadas a la concentración, pero los espacios predominantes fomentan la inspiración, la creatividad y las actividades comunitarias en las zonas de reunión. En el edificio, casi todos los espacios se utilizan para más de una función y nunca quedan vacíos: el anfiteatro puede utilizarse para aprender, jugar, actuar y comer; el vestíbulo es un espacio para leer, realizar actividades creativas, reunirse con los padres o incluso bailar.




Esta escuela aspira a ser algo más que un lugar donde se imparten clases: se esfuerza por ser un espacio animado y bullicioso donde se reúnen alumnos, profesores, padres e incluso vecinos de la zona. Por ello, la primera planta se abrió al público: los espacios comunes, las salas deportivas y los anfiteatros se utilizan no sólo para la enseñanza, sino también para actos, mercados, seminarios y representaciones. Todas estas decisiones reflejan el deseo compartido de crear un edificio que no esté aislado de la ciudad, sino que se integre en el entorno, de modo que viva al ritmo de la ciudad y su gente. Las dimensiones, el volumen y la forma del edificio no se alteraron. Las fachadas renovadas se acabaron con planchas de acero galvanizado lisas y volumétricas, que confieren a la edificación un carácter industrial. Cada plancha es única, difiere en el dibujo y reacciona al entorno y las estaciones con reflejos, creando un efecto visual vivo y dinámico con ligeras pinceladas y sombras. Para enfatizar el carácter industrial heredado, los elementos de acabado de chapa galvanizada también se reflejaron en los elementos y anfiteatros interiores; estos detalles crean una experiencia estética diferente y extienden la filosofía de la escuela de que los niños disfruten creciendo rodeados de materiales reales.

Esta obra es una visión tanto arquitectónica como pedagógica, en la que la escuela moderna no es sólo un espacio para el aprendizaje, sino también un espacio para la libertad creativa, que inspira a los niños tanto para el logro académico como para el desarrollo personal. El edificio se ha convertido en un elemento clave revitalizado del tejido urbano de la ciudad, conectando el pasado con el presente y creando un espacio único donde profesores, niños, padres y público pueden aprender y crecer juntos.
